Contacto:





Si existe algún link roto que impida descargar un libro por favor envíanos un correo electrónico con el link a la entrada del libro que no puedes descargar y el asunto: "LINK ROTO". Lo arreglaremos lo más pronto posible.

bloglibrosvampiricos@gmail.com

miércoles, 20 de mayo de 2009

"Blue Moon" de Alyson Noel / Capitulo 1

Continuacion de Evermore:

Fragmento de Blue Moon!! Traducido por
http://ilonga-literaturajuvenil.blogspot.com/

ATENCION! CONTIENE SPOILERS!


Capitulo 1

“Cierra tus ojos e imagínalo. ¿Puedes verlo?"


Yo asiento con la cabeza, con mis ojos cerrados.

“Imagínalo justo en frente tuyo. Ve su textura, forma y color. ¿Lo captaste?”

Yo sonrío, reteniendo la imagen en mi cabeza.

“Bien. Ahora extiende tu mano y tócalo. Siente sus contornos con la punta de tus dedos, acuna su peso en la palma de tus manos, luego combina todos tus sentidos: vista, tacto, olfato y sabor. ¿Puedes saborearlo?”

Yo muerdo mi labio y suprimo una risa.

“Perfecto. Ahora combina eso con el sentimiento. Tienes que creer que eso existe justo frente a ti. ¡Siéntelo, velo, tócalo, pruébalo, acéptalo, manifiéstalo!” Él dice.

Y lo hago. Hago todas esas cosas y cuando el gruñe, abro mis ojos para verlo por mí misma.

“Ever.” Él sacude su cabeza. “Se supone que pienses en una naranja. Esto ni siquiera parece una naranja.”

“Nop, no hay nada frutoso en él.” Yo río mientras sonrío a mi réplica de Damen. La réplica que manifesté justo frente a mí, y la versión de carne y hueso que tengo al lado mío. Ambos igualmente altos, oscuros y tan devastadoramente guapos, que difícilmente parecen reales.

“¿Qué voy a hacer contigo?” Pregunta el Damen real intentando mostrar una mirada desaprobadora, pero fallando miserablemente. Sus ojos siempre traicionándolo, mostrando nada más que amor.

“Hmmm…” Yo miro a mis dos novios: uno real y el otro conjurado. “Supongo que podrías venir y besarme, pero si estas demasiado ocupado se lo pediré a él. No creo que le moleste.” Yo me acerco al Damen manifestado, riendo cuando él sonríe y me guiña, aún cuando sus bordes se están desvaneciendo y pronto se habrá ido.

Pero el Damen real no ríe. Él solo sacude la cabeza otra vez y dice, “Ever, por favor. Necesitas ser más seria. Hay mucho por enseñarte.”

“¿Por qué tanta prisa?” Me encojo de hombros, abrazando mi almohada y golpeando el espacio al lado mío, deseando que él se mueva de mi escritorio y me acompañe. “¿No se supone que lo más que tenemos es tiempo?” Sonrío y cuando él me mira, todo mi cuerpo se acalora, mi respiración se detiene en mi garganta y no puedo evitar el preguntarme si alguna vez me acostumbraré a su increíble belleza, su suave piel oliva, su lustroso pelo marrón, su cara perfecta y su delgado y escultural cuerpo. El perfecto ying para mi yang. “Creo que encontrarás en mi a una estudiante bastante entusiasta,” le digo mientras mis ojos se encuentran con los suyos, dos oscuras ruedas de insondable profundidad.

“Eres insaciable,” él susurra, sacudiendo su cabeza y moviéndose junto a mi, tan atraído a mi, como yo lo estoy hacia él.

“Estoy tratando de reponer todo el tiempo perdido,” murmuro, siempre tan ansiosa por estos momentos, los momentos cuando solo estamos él y yo y no tengo que compartirlo con nadie. El hecho de que sé que tenemos toda la eternidad no me hace menos codiciosa.

Él se inclina para besarme, claramente olvidando nuestra lección. Todos los pensamientos para manifestar, ver lo remoto, telepatía; todos esos asuntos psíquicos reemplazados por algo mucho más inmediato, mientras él me recuesta sobre una pila de almohadas y cubre mi cuerpo con el suyo, ambos fundiéndonos como dos viñas disfrutando del calor del sol.

Sus dedos serpentean bajo mi blusa y luego se deslizan por mi estómago hacia el borde de mi sostén mientras yo cierro mis ojos y susurro, “te amo.” Palabras que una vez guardé para mí. Pero luego de decirlo por primera vez, es casi todo lo que digo.

Escucho como gime suavemente mientras suelta el cierre de mi sostén, sin mucho esfuerzo, todo tan perfecto, sin nada de incomodidad o torpe nerviosismo.

Todo movimiento que él hace es tan grácil, tan perfecto, tan-

Tal ves demasiado perfecto.

“¿Qué pasa?” Él pregunta, mientras yo lo alejo. Su respiración esta entrecortada mientras sus ojos buscan los míos. El área alrededor de sus ojos tensándose y contrayéndose en esa manera en que ya me he acostumbrado.

“No pasa nada.” Le doy la espalda mientras arreglo mi blusa, contenta por haber completado mi lección de cómo escudar mis pensamientos, ya que es la única cosa que me permite mentir.

Él suspira y se levanta de la cama, negándome el hormigueo de su tacto y el calor de su mirada mientras camina de un lado a otro frente a mi, y cuando finalmente se detiene y me encara, presiono mis labios sabiendo lo que viene. Ya hemos pasado por esto antes.

“Ever, no estoy tratando de presionarte ni nada. De verdad que no lo estoy,” él dice con su rostro lleno de preocupación. “Pero en algún momento vas a tener que terminar con esto y aceptar quién soy. Puedo manifestar cualquier cosa que desees, mandarte pensamientos por telepatía e imágenes cada vez que estamos separados, llevarte a Summerland en cualquier momento. Pero la única cosa que jamás podré hacer es cambiar el pasado. Simplemente así es.”

Yo me quedo mirando al suelo, sintiéndome pequeña, necesitada y completamente avergonzada. Odiando que sea tan incapaz de ocultar mis celos e inseguridades, odiando que ellos sean tan transparentes y claramente expuestos. Porque no tiene caso, sin importar que clase de escudo cree. Él ha tenido seiscientos años para estudiar el comportamiento humano, para estudiar mi comportamiento, mientras que yo solo tengo diecisiete.

“Solo, solo dame un poquito de tiempo para acostumbrarme a todo esto,” le digo, jugueteando con un hilo suelto del forro de mi almohada. “Han pasado solo unas semanas.” Me encojo de hombros, recordando cómo maté a su ex esposa, le dije que lo amaba y sellé mi destino inmortal, y todo eso pasó hace menos de tres semanas.

Él me mira con sus labios tensos y ojos dudosos, y aunque estamos a solo pulgadas de distancia, el espacio que nos divide es tan pesado y cargado, que se siente como un océano.

“Me refiero a esta vida,” le digo, mi voz acelerándose, volviéndose más alta, intentando llenar el vacío y aliviar el ambiente. “Como no puedo recordar mis otras vidas, es con lo único que tengo que lidiar. Solo necesito un poco más de tiempo. ¿Esta bien?” Sonrío nerviosa, mis labios sintiéndose torpes y flojos, y luego exhalando aliviada cuando él se sienta al lado mío, llevando sus dedos hasta mi frente, buscando el espacio donde solía estar mi cicatriz.

“Bueno esa es una cosa que nunca nos faltará.” Él suspira, trazando con sus dedos la línea de mi mandíbula mientras se inclina para besarme, sus labios haciendo una serie de pausas en mi frente, en mi nariz y luego otra vez en mi boca.

Y cuando creo que él me va a besar otra vez, él aprieta mi mano y se aleja caminando directamente hacia la puerta y dejando en su lugar un hermoso tulipán rojo.

No hay comentarios: